18 de mayo: nacimiento de Margot Fonteyn
18 de mayo de 1919: nace Margot Fonteyn
Nació en Reigate, condado de Surrey, Inglaterra, el 18 de mayo de 1919, y su nombre real era Margaret Hookham, hija de padre inglés y madre brasileña de apellido Fontes, de donde adoptaría su apellido artístico.

Comenzó la sus estudios en Hong Kong, donde residía con su familia, y los continuó años después en Londres, ciudad a la que regresó y audicionó para el Vic Nelly Ballet. Fue en esta compañía donde debutó a los quince años, en 1934, con la obra Cascanueces. Apodada “El Cisne” por su elegancia y calidad interpretativa, se mantuvo activa hasta pasados los 50 años, participando no sólo en espectáculos teatrales sino también en producciones cinematográficas y televisivas. Sus personajes más destacados fueron Aurora en La Bella Durmiente, Giselle en Giselle el difícil rol Odette/Odile de El Lago de los Cisnes.

Su primer papel principal completo en un ballet de repertorio lo tuvo en Giselle (1937), de Adolphe Adam.
Su elegante línea y refinado estilo, que hacían de ella el símbolo por excelencia de la bailarina clásica, fueron causa de que muchos otros coreógrafos realizaran ballets para ella. Así, estrenó Hamlet (1942), de su inseparable partenaire Robert Helpmann, Les Demoiselles de la Nuit (1948), de Roland Petit con los Ballets de París, Poème de l’extase (1970), de John Cranko con el Ballet de Stuttgart, y The Scarlet Pastorale (1975), de Peter Darrell.

En 1961 Rufolph Nureyev escapó de la URSS, y la coreógrafa Ninette de Valois lo invitó a bailar en Londres como partenaire de Fonteyn, quien ya había sido consagrada estrella del Royal Ballet de Londres. Aunque a priori no se le auguraba demasiado futuro a esta alianza, fundamentalmente debido a los cuarenta y tres años de edad de Fonteyn y a que tenía intención de retirarse definitivamente de la profesión, persistió con éxito.
A lo largo de 18 años de actuaciones, la pareja Fonteyn/Nureyev fue la más famosa en la historia del ballet clásico.
La pasión que despertaban en el público era tan grande que, por ejemplo, durante una función en Viena fueron llamados ochenta y nueve veces a escena para saludar al público presente en la sala, que vibraba de emoción y entusiasmo
En 1967 hicieron una presentación inolvidable en el Teatro Colón de Buenos Aires. Finalmente Fonteyn se retiró de los escenarios en el año 1970, a los 51 años de edad, lo que era toda una hazaña para una bailarina con tanta continuidad en la actuación y con una desenvoltura y agilidad que sorprendía notablemente tanto a su público como a los críticos en la materia. A partir de entonces se instala definitivamente en Panamá, donde fallece en 1991.